Viajar durante el embarazo

Información y cuidados

"Viajar Cuando se espera un niño las dudas, las perplejidades, aumentan y por cualquier cosa nos preocupamos. Por ejemplo ¿es posible viajar? ¿Le hará mal a nuestro niño?

En general los desplazamientos breves no crean grandes problemas y una vacación o un cambio, si es deseado, no pueden sino hacernos bien. Viajes largos pueden cansarnos y para poderlos realizar es necessario que este segura de poderlo realizarlo antes, despues y durante.

Si se viaja en avión es importante beber mucho para no incurrir en un estado de deshidratación, de hecho en las cabinas el aire es muy seco, con una humedad que gira en torno al 20%.

Se debe evitar el café y el té que aumentan el estado de deshidratación. Si se viaja en avión es aconsejable no mantener la posición sentada a lo largo y para esto es buena cosa tener un lugar cerca del corredor y buscar moverse unos 15 minutos cada hora o efectuar regularmente oportunos ejercicios de estiramiento de las piernas.

El movimento es importante porque la situación hormonal y el peso de la panza aminoran la circulación sanguínea favoreciendo la formación de coagulos de sangre. Aconsejamos entrenamientos suaves con la utilización de la gym ball o pelota suiza o el fit hill
El mejor momento para emprender un viaje es entre la decimosexta y la 30a semana.
Muchas compañias aereas no aceptan en sus viajes mujeres después de la 35a semana de gestación y en algunos casos, sobretodo en viajes largos, luego de la 28-30a semana, por lo tanto es recomendable informarse con cada compañia aerea.
En general las compañias requieren la compilación del “Medif” o “Medical information form”: se trata de un módulo que tiene validez internacional y que proporciona la información sobre el estado del embarazo y sobre la salud de la madre.
Es siempre bueno que tenga consigo un certificado de su ginecólogo que atestigue la época de la gestación y la fecha presumible del parto.

 

Durante el viaje en avión existen algunas reglas que deben observarse y que no comportan riesgos para la madre ni para el feto.
La cintura de seguridad, obligatoria durante las fases de aterrizaje y de decolo, deberá ser colocada durante el viaje entero para contrarestar los eventuales turbulencias imprevistas, y es oportunos ajustarla bajo el abdomen para que no moleste.
Contra los efectos del Jet-lag, es aconsejable dormir bien la noche anterior al vuelo y si la permanencia en el lugar de destinación no supera los 2 dias, mantener las agujas biológicas con el horario de casa. Si en cambio la permanencia es prolongada, es bueno atenerse a reglas de vida saludables para adecuarse lo antes posible al horario local, teniendo en cuenta que en generale la recuperación del Jet-lag es más rápidad si se viaja hacia el oeste.

 

En lo que respecta a las vacunaciones esto debería ser efectuado sólo en situaciones bien definidas ya que todas las vacunas con microorganismos vivientes estan contraindicadas, para las otras es necesaria una cuidadosa evaluación de los riesgos/ beneficios por parte del médico.
En sintesis un viaje breve a paises de bajo riesgo, no crea en general serios problemas. Al contrario, un largo viaje o una estadía prolongada en areas de alto riesgo (areas con endemia de malaria, rurales) o actividades peligrosas deberían ser programadas con gran cuidado y mil precausiones y dentro de lo posible evitadas.

¿Desea controlar con precisión y comodidad, su peso?

Cada actividad y el eventual itinerario debería ser discutido con el médico a cargo. Respecto a los viajes en automóbil no deberían crear algun problema, también en este caso evitar estar sentadas muchas horas e intercale los viajes con breves paradas en las cuales pueda caminar.
Cualquiera sea la meta y el medio utilizado en la maleta no deben faltar vestidos cómodos, amplios y suaves, tipo tutas de algodón o camisolas.

 

Es mejor vestirse con varias capas superpuestas “tipo cebolla” para no advertir el calor o sufrir golpes de frío. Es útil tener un pañuelo al cuello que proteja del aire acondicionado y llevar medias elásticas que ejerciten una ligera presión sobre la parte baja de las piernas, favoreciendo el retorno de la sangre desde las zonas periféricas del cuerpo.
Los zapatos deben ser cómodos con taco de 3-4 cm, de modo que brinde al talón un buen sostén, a fin de favorecer una buena circulación.

 

Recordarse de llevar consigo las medicinas necesarias. Es muy importante no ingerir antes del viaje alimentos grasos y proteicos y preferir los ricos en almidón como pan, pasta o arroz. Estos alimentos, de hecho, poseen la capacidad de aumentar la resistencia del organismo a la disminución del oxígeno en alta medida.

También alimentos ricos de vitamina C, B y E son eficaces en este sentido. La vitamina C mejora la tensión de las venas capilares y es ampliamente difundida en los alimentos de origen vegetal; particularmente ricos son los cítricos, kiwis, pimientos, tomates y las hortalizas de hoja verde.

La verdura y la fruta que son conservadas por mucho tiempo antes de ser consumidas, sufren grandes pérdidas de vitaminas. También tratamientos que comportan lavajes con gran cantidad de agua y sucesiva cocción pueden llevar a notables pérdidas (hasta a alcanzar en algunos casos casi el 75%).

La vitamina C, entre las vitaminas, es aquella que sufre mayores degradaciones, sea por la inestabilidad al calor y al oxígeno del aire que por su hidrosolubilidad, tanto que la medida de su concentración es a menudo utilizada como indicador de cualidad de los procesos de elaboración y producción.

Recapitulizando, si el viaje es por la mañana se aconseja un desayuno a base de esprimidos, cítricos y pan con mermelada.

Si se viaja de mediodia, mantener el desayuno como se ha indicado y almorzar con pasta o arroz con salsa de tomate o a la manteca con poco queso rayado, acompañando con verduras y una fruta.