CARNES
Preferir las carnes magras tipo pollo, pava, ternero, ternera magra, conejo, cerdo magro.
No es verdad que las carnes blancas contengan menos Hierro que las carnes rojas. Consumir con moderación despojos (hígado, corazón, etc…) ya que son ricas en colesterol.
Métodos de cocción: al gril, hervida, tipo escalope, al horno.
EMBUTIDOS
Preferir el jamón dulce o York o crudos magros y la bresaola. Evitar: salames, mortadela, etc.
PESCADOS
Preferir pescados frescos o congelados tipo lenguado, merluza, pescadilla, dorada, rodaballo, trucha. Consumir molúscos y crustáceos (almejas, gambas, etc) con moderación ya que son ricas en colesterol. Métodos de cocción: al gril, al horno, al vapor. Evitar los fritos.
HUEVO
Preferir los huevos duros o pasados por agua o en omelette cocida al horno o en sartén antiadherente.
Evitar los huevos fritos.
No es verdad que los huevos hagan mal al hígado.
LECHE Y DERIVADOS
Preferir leche parcialmente descremada o yogur desnatado. Recordar que no existen los quesos magros. Preferir los quesos frescos tipo ricota de vaca o mozzarella
CEREALES Y PATATAS
Si es posible preferir los cereales integrales (pan, pasta, arroz…). Limitar el consumo de pasta fresca rellena (tortellini, añolotis, ravioles) ya que son ricas de grasas animales. Evitar el consumo de pan conservado, pan al aceite, de molde, por el alto contenido de lípidos. Las patatas no son verduras y deben ser consumidas como reemplazo del pan o de la pasta.
LEGUMBRES
Se pueden consumir solos o junto con cereales (ej: pasta y judías): permite asumir proteínas símiles a las de la carne (conteniendo todos los aminoácidos escenciales). Siendo ricos de fibra ayuda a regularizar el intestino.
GRASAS PARA CONDIMENTAR
Preferir el aceite de oliva o de maíz o de soja. Para freír utilizar aceite extravirgen de oliva.
Evitar el consumo de mantequilla, tocino y manteca.
HORTALIZAS Y FRUTA
Variar cada días los tipos de verdura y fruta recordando que las amarillentos-naranja y verde oscuro son ricos en Vitamina A (albaricoque, zanahoría, calabaza, espinacas, acelgas) mientras que son ricos en Vitamina C las hortalizas tipo los tomates, coliflor, brécol y la fruta de sabor ácido (limones, naranjas, kiwis, fresas…).