Magnetoterapia:

tratamiento de las enfermedades mediante el magnetismo

La MAGNETOTERAPIA es una terapia que utiliza aparatos generadores de campos magnéticos a baja intensidad y a frecuencia variable. La historia de la magnetoterapia es muy antigua, remontándose a los egipcios, los griegos y los hebreos.
Desde fines del siglo XIX, pero sobretodo en el siglo XX, han sido llevadas a cabo numerosas investigaciones clínico-terapéuticas para estudiar científicamente los posibles efectos de los campos magnéticos sobre los seres vivos, en particular en los seres humanos.

Actualmente, la moderna magnetoterapia ha sido reconocida a nivel nacional  e internacional como terapia en el campo de la Homeopatía y Naturopatia.

A nivel fisiológico, la magnetoterapia, actúa a sobre las células repolarizándolas y reequilibrando la permeabidad de la membrana celular, es decir, mejoran las funciones de la célula a raíz de un mejor uso del oxígeno. Si se acercan, de hecho, partes del cuerpo a la esfera de acción del campo, las líneas magnéticas de influjo atraviezan completamente las partes en profundidad. De este modo, los iones en el interior de la célula son influenciados por las ondas y la alteración del flujo potencial eléctrico de la célula que resulta mejora la transformación del oxígeno. Seguido por un aumento de la vascularización, así la actividad biológica aumenta.

Este efecto puede ser usado para múltiples objetivos terapéuticos mejorando:

    • 1. Disturbios de tipo inflamatorio (artrosis, neuritis, flebitis, tendinitis, estiramientos musculares,)
    • 2. Disturbios articulares
    • 3. Traumas recientes
    • 4. Reparación de las úlceras de todo tipo: (traumáticas, de decubito, de ustiones, refractarias a otras terapias, venosas (especialmente de tipo crónico), y en todas aquellas patologias en las cuales es requerido una mayor micro vascularización y/o regeneración de los tejidos, cuales el progreso de autotrasplantes, el consolidamiento de callos óseos, etc.
    • 5. Enfermedades reumáticas, en las patologias articulares cuales artrosis, tendinitis, epicondilitis, bursitis, periartritis, cervicalgias,lumbalgias, mialgias, tratamiento de las fracturas, sea durante que después del uso de yesos (de hecho, la magnetoterapia influye directamente sobre el tejido óseo, acelerando la formación del callo óseo, mobilizando los iones de Ca++)

Un campo de aplicación en el cual se tienen resultados evidentes es aquel de la osteoporosis, enfermedad que en muchos casos degenera, con dolores y con eventuales microfracturas a nivel de los cuerpos de las vértebras, en aumento de la cifosis y en la reducción de altura de las vertebras con compresión a nivel de la columna vertebral y dificultad en la deambulación.

No hay específicos remedios para curar la osteoporosis, pero el tratamiento con campo magnético repetido más veces al año, reduce el proceso degenerativo. La enfermedad del anciano encuentra en la magnetoterapia una ayuda válida regenerando las células y dando una sensación de adquirida energía.

Es necesario, en fin, subrayar que la magnetoterapia NO presenta particulares contraindicaciones o efectos colaterales, sino en pacientes en las siguientes situaciones (las contraindicaciones a la magnetoterapia son pocas y muchas veces sólo temidas por motivos de precaución):

  • portadores de estimuladores cardiacos y pacemaker o eventuales aparatos acústicos no se deben llevar puestos durante el tratamiento
  • prótesis metálicas o mioeléctricas
  • insuficiencia coronaria, disturbios hematológicos (anemia, leucosis, etc..)
  • estados hemorrágicos de cualquier tipo en cuanto tras el tratamiento podría aumentar el flujo sanguineo
  • graves enfermedades de los vasos
  • disturbios psíquicos
  • epilepsia
  • enfermedades infecciosas con estados febriles de origen bacteriana o virales, micosis, hiperfunción tiroidea y síndromes endócrinos, tuberculosis, insuficiencia hepática, insuficiencia renal, diabetes juvenil, embarazo, D.I.U.